120 líderes mundiales se han reunido en la cumbre climática de la ONU COP26 en Glasgow para revelar sus últimos compromisos con un futuro más sostenible, reducir emisiones para a cumplir el objetivo del Acuerdo de París de limitar el calentamiento global a 1,5 grados centígrados este siglo.
Aplazado el año pasado debido a la COVID-19 pandemia, la 26 Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26) comenzó poco después de la publicación de un informe que muestra que el mundo está en camino del aumento de 2,7 grados centígrados de la temperatura global en 2100, muy por encima del límite de 1,5 grados que los científicos reconocen como clave para prevenir un calentamiento global altamente peligroso.
Este año además se ha abordado también un tema que ha generado mucha expectativa, el de poner fin a la venta de coches con motor de combustión interna. Aunque este acuerdo implica, de momento, a pocos participantes, relativamente. Siendo los gobiernos de treinta países, los de ocho regiones, seis fabricantes y una veintena de gestores de flotas quienes han anunciado que habían adoptado un acuerdo sobre los vehículos de emisiones cero, junto con un calendario para el fin de las ventas de vehículos con motor de combustión.
Se estima que los coches, camiones y vehículos de dos o tres ruedas producen el 75% de las emisiones en el transporte y que habrá 2.000 millones de automóviles en 2050. Por ello, la fabricación de vehículos eléctricos, tiene fuerte impacto ecológico, pero es, tras la generación de electricidad, el área industrial con un avance quizás más rápido hacia la descarbonización.
Aunque dicha declaración no incluye a los grandes mercados de China, Japón y Estados Unidos, grandes fabricantes, entre ellos General Motors, Mercedes-Benz o Jaguar-Land Rover, se comprometen a acelerar rápidamente la transición a vehículos con cero emisiones. El acuerdo en cuestión compromete a los firmantes a poner fin a la venta de coches nuevos que generen emisiones en «los principales mercados» para el año 2035, y a nivel mundial para 2040.
En Grupo Laura Otero, contribuimos, sabiendo la importancia tanto del cambio climático como del ahorro energético, cambiando paulatinamente nuestra flota de vehículos a modelos más sostenibles. Incorporando unidades eléctricas e híbridas, que nos permiten ofrecer un servicio en la línea de nuestra apuesta por salvaguardar el medioambiente.