Cada día estamos más concienciados de la importancia que tiene el cuidado del medio ambiente y el uso eficiente de la energía para facilitar la vida y contaminar menos. El estudio de arquitectura Snøhetta es un buen ejemplo de ello, debido a su potencial para el diseño de edificios ecológicos y sostenibles.
Recientemente han presentado Brattørkaia, un edificio de oficinas que genera 500.000 kWh de electricidad durante un año, lo que equivale a más del doble de la energía que necesita. Es por ello que posiblemente nos encontramos ante el edificio más sostenible hasta la fecha.
Situado en Trondheim, Noruega, tiene una superficie de 18.000 m2. En la parte superior destaca su techo pentagonal, donde están colocados 3.000 m2 de paneles solares. La generación de energía no es el único ingrediente que hace que este sea un edificio extremadamente sostenible. También destaca por sus excelentes sistemas de aislamiento y ventilación, que permiten mantener una temperatura agradable en el interior minimizando el impacto energético ocasionado por la climatización. En cuanto a iluminación se refiere, dispone de sensores de movimiento para encender las bombillas LED únicamente cuando hay personas en el área. Además, cuenta con un sistema de monitorización para llevar a cabo un seguimiento de la utilización de la energía.
Gracias a sus cualidades, Powerhouse Brattørkaia ha obtenido una calificación de sobresaliente en la certificación BREEAM, que es la clasificación más alta según el estándar de construcción ecológica y sostenible.