La energía renovable es cada día más importante. Debido a sus múltiples ventajas y a los importantes avances que se llevan a cabo, es el modelo energético que se establecerá en un futuro próximo.
Y no lo decimos nosotros, sino que queda reflejado con la convocatoria de ayudas a instalaciones de energías renovables 2018-2019 en Extremadura, que ya ha recibido más de mil solicitudes durante los seis primeros meses desde su publicación. Del total de las peticiones, unos 715 son expedientes que ya están listos para comenzar su tramitación, de los más de trescientos restantes aún queda pendiente revisar la documentación. A estas cifras habría que sumar también los casos en los que se han denegado las peticiones.
Entre los expedientes abiertos prima la energía fotovoltaica, que supone casi siete de cada diez solicitudes, con 495 en total. A continuación, aparecen las instalaciones de biomasa, con 153. A mucha distancia de las dos primeras tecnologías, el resto: aerotermia (51 solicitudes), solar térmica de baja temperatura (14) y geotermia (2).
Los beneficiarios de estas ayudas pueden dividirse en tres grupos. En primer lugar, el de los particulares personas físicas con viviendas en propiedad, a las comunidades de propietarios y a las asociaciones sin ánimo de lucro. En segundo, municipios y entidades locales menores. En tercer lugar, empresas privadas y sus agrupaciones.
La cuantía de la subvención otorgada puede ir variando en función de la persona que lo solicite y de la instalación planteada.