Una vez ya inmersos en el mes de mayo, cuando debía celebrarse la gala del XI Certamen de Pintura Fundación Laura Otero, es buen momento para echar la vista atrás y repasar algunas de las grandes obras que nos han dejado los participantes en ediciones anteriores.
En esta jornada nos centramos en el trabajo realizado el pasado ejercicio por Leonor Solans, quien logró hacerse con el primer premio de la décima edición del certamen. En esta ocasión nos hemos permitido el lujo de captar una parte de la composición, con la mirada de la joven y el reflejo del mundo exterior. Toda una alegoría para una sociedad que vive confinada la mayor parte de las horas del día y a la espera de poder retomar el pulso de su cotidianidad.
Aunque por motivos obvios no ha podido satisfacerse tal y como estaba prevista, esta undécima edición del certamen espera con calma que las autoridades sanitarias den el visto bueno a la celebración de este tipo de eventos para reorganizar toda la programación.