El 91% del consumo de energía renovable que se lleva a cabo en los hogares españoles procede de la biomasa. Así lo certifica el Ministerio para la Transición Ecológica en su último estudio publicado en 2018, donde los investigadores hacen un pormenorizado recorrido por todas las variables existentes.
Este tipo de energía renovable es principalmente utilizado para la calefacción, aunque también tiene otros usos, como por ejemplo para el agua caliente o la cocina. Donde la biomasa todavía no está popularizada es en sistemas de refrigeración, pues en este campo apenas copa una cuota del 0,1%.
En el total de fuentes relacionadas con el consumo de energía en el hogar, la eléctrica continúa acaparando la mayor parte del mercado, con casi un 40 por ciento.