Siempre en constante lucha para alcanzar la sostenibilidad, los trabajos de investigación nunca dejan de arrojar asombrosos descubrimientos. Uno de los últimos ha sido llevado a cabo por la Universidad de Pensilvania, donde han desarrollado un prototipo que, en principio, permite utilizar los campos magnéticos presentes en los diferentes dispositivos de nuestros hogares para generar electricidad.
Lo realmente revolucionario es que, según los investigadores, esta técnica superaría con creces la producción de otros mecanismos actuales que trabajan con campos magnéticos, concretamente hasta un 400% más de producción de energía. Una técnica que, en el caso de que pueda ser implementada, supondría un gran apoyo para la eficiencia energética en los edificios.
Los prototipos utilizados en la actualidad miden menos de cuatro centímetros y tienen un grosor similar al que puede presentar un folio. El sistema investigado permite transformar las vibraciones generadas por el campo magnético en energía eléctrica.