El sector de la biomasa y concretamente su faceta térmica, ha experimentado un gran progreso durante estos últimos años en España. De manera que, en la actualidad se encuentra en condiciones de aspirar a satisfacer el 50% de la energía utilizada para la calefacción, lo que implicaría cuadruplicar su peso actual a medio plazo.
El número de estufas y calderas de biomasa no para de crecer, superando ya las 250.000 instalaciones. Las ventas de pellet y astillas de calidad aumentan año tras año. Y es que España posee un sector muy competitivo, en precios y términos de seguridad y confort para el usuario.
Para lograr un aporte del 50% de la energía nacional de calefacción se necesita el apoyo del Gobierno central y de las comunidades autónomas, que deben permitir la viabilidad de grandes proyectos. Es imprescindible también mantener el ritmo de crecimiento en la instalación de estufas y calderas pequeñas.
Según Avebiom las previsiones del sector son optimistas. El sector de la biomasa podría ayudar a conseguir una mayor independencia energética de España, que cada día se desengancha un poco más de los combustibles fósiles, en su mayoría importados.